Ficha técnica
- Distancia: 1,5 km
- Niños: Apta para niños
Con la Ruta de los Puentes de Girona os proponemos un circuito diferente y original para conocer la ciudad. Esta ruta nos permite visitar algunos de los rincones más destacados de Girona en pocas horas o, en caso de disfrutar de varios días de estancia, hacernos una idea inicial de la ciudad para después profundizar más.
El Barri Vell y el Barrio del Mercadal de Girona están separados por el río Onyar. Este factor ha provocado que históricamente haya sido muy importante el papel de los puentes en la comunicación entre los dos principales ejes de la ciudad. Estas construcciones se han acabado convirtiendo en un destacado referente arquitectónico para la población.
Pont de Sant Feliu
Empezamos nuestra ruta en el parking de la Copa, un lugar desde donde disfrutaremos de una espectacular vista de la Iglesia de Sant Feliu, con la Catedral justo detrás. En este punto encontraremos el primero de los puentes que conoceremos durante nuestra ruta, el Pont de Sant Feliu. Construido en 1995, su arquitectura ya nos indica que se trata de un puente muy actual, y nos sirve como puerta de entrada al Barri Vell de Girona.
Una vez hayamos cruzado el Onyar, encontraremos el Cul de la Lleona a mano derecha. Se trata de una icónica escultura a la que, según la tradición, deberemos besar el culo si queremos volver a la ciudad. Seguramente tendréis que hacer cola, ¡el culo de la Leona es muy preciado! Después de haber cumplido con el ritual – o no – podemos disfrutar durante unos minutos de la monumentalidad de la Iglesia de Sant Feliu, justo antes de encaminarnos hacia la Calle Calderers en dirección al centro de la ciudad.
Pont d'en Gómez
La estrecha y encantadora calle Calderers ya nos ofrece una primera impresión de la arquitectura y estética del Barri Vell de Girona. Al final de esta calle, junto a una farmacia y medio escondido por las fachadas de las casas del Onyar, encontraremos el acceso al Pont d'en Gómez. Este puente cuenta con mucha más historia que el primero que hemos encontrado, ya que fue construido en 1916, y debe su nombre al propietario de la casa que tuvo que ser parcialmente derribada para poder edificar este paso sobre el Onyar .
El puente nos conducirá hacia la Calle José Canalejas, que servirá de ruta de acceso hacia la espectacular Plaça de la Independencia. Este es un espacio rodeado de edificios neoclásicos con porches en los bajos, donde encontraremos una gran cantidad de bares y restaurantes con una oferta gastronómica muy rica y variada. La escultura que encontramos en el centro de la plaza es un monumento dedicado a los defensores de la ciudad durante los asedios de 1808 y 1809.
Pont de Sant Agustí
Siguiendo nuestra ruta hacia el centro de la ciudad, debajo de las vueltas de la misma plaza, encontraremos el acceso que nos conduce hacia el Pont de Sant Agustí. La estructura toma su nombre del antiguo convento que funcionó en este espacio entre los siglos XVII y XIX. Este puente ha sufrido numerosas reformas durante su historia. La estructura que vemos hoy día tiene su origen en 1973.
Cruzaremos por tercera vez el Río Onyar para ir a encontrar la Calle de la Argenteria y La Rambla de la Llibertat, dos de las calles que ningún visitante de la ciudad puede dejar de ver. Este es uno de los principales centros comerciales y turísticos de la ciudad. Aquí encontraremos una gran cantidad de pequeños comercios, algunos de ellos históricos y muchos pequeños bares y restaurantes.
Durante nuestro paseo por la Rambla veremos que a mano derecha aparece otro puente. Este lo pasaremos de largo. Lo visitaremos un poco más adelante!
Pont de Pedra
Al final de la Rambla encontraremos el puente más monumental de Girona. El Pont de Pedra, situado a pocos metros del histórico Hotel Peninsular, data de 1856 y une el Barri Vell con el Eixample. Desde este emplazamiento podremos disfrutar de una vista espectacular y privilegiada de las casas del Onyar. Es posible que los visitantes más curiosos y observadores sean capaces de encontrar alguna sorpresa fósil entre las piedras que forman la barandilla del puente.
Después de cruzar el Pont de Pedra, a mano derecha encontraremos la calle Santa Clara. En esta calle seguiremos en dirección a la Plaça de la Independencia, que hemos visitado anteriormente. La calle Santa Clara es otro de los principales atractivos de la ciudad para disfrutar de un tranquilo paseo y visitar alguna de sus pequeñas tiendas.
Pont de les Peixateries Velles
Cuando vemos que en el fondo de la calle aparece el acceso a la Plaça de la Independencia deberemos girar a mano derecha, porque ya habremos llegado al que seguramente es el puente más fotografiado y conocido de Girona: el Pont de las Peixateries Velles, también conocido como Pont de Ferro.
Este puente data de 1877, y fue construido por la compañía francesa Eiffel et Cie., la misma empresa responsable de la famosa Torre Eiffel de París, que fue inaugurada algo más tarde, en 1889.
Después de haber cruzado el río Onyar por quinta vez, volveremos a estar situados en La Rambla de la Llibertat.
Si todavía disponéis de tiempo, os recomendamos que en este punto os deje perder por el Barri Vell de Girona. Algunas magníficas opciones son seguir por la Cort Reial y la Pujada de Sant Domènec, donde descubriréis algunos de los rincones con encanto que han aparecido en numerosas películas, o encararnos hacia la calle de La Força para ir a conocer el Call Jueu y la Catedral de Girona, convertida también en plató de rodaje durante la sexta temporada de Juego de Tronos.