Ficha técnica
- Distancia: 6 km
- Niños: Apto para niños
Te proponemos una ruta para conocer algunos de los rincones más emblemáticos de Blanes.
Empezamos en Sa Palomera, la formación rocosa que marca el punto de entrada a la Costa Brava. Desde aquí, podemos disfrutar de unas vistas increíbles sobre el pueblo, principalmente del Paseo de Mar, la playa S'Abanell, la Playa de Blanes y, más lejos, el puerto.
Seguimos por el Paseo de Mar, con la playa a mano derecha y los locales de restauración a mano izquierda. Al final del paseo podemos observar la montaña y el castillo de Sant Joan, al que iremos más tarde, y el puerto pesquero y deportivo al que nos dirigimos. En el puerto encontramos varios bares y restaurantes donde comer y tomar algo, disfrutar del sol y contemplar las barcas amarradas. El paseo nos acaba conduciendo hasta la playa de Santa Ana, situada detrás del puerto.
Volvemos por donde hemos venido y giramos a la derecha por la calle Ample. Subimos la calle pasando por delante de Plaça Espanya, la Fuente Gótica y el teatro de Blanes hasta girar a la derecha por la Calle Raval. Seguimos adelante dejando la iglesia a mano derecha, y al final de la calle giramos a la izquierda por la calle dels Filadors. Desde aquí, vamos serpenteando por las callejuelas durante aproximadamente un kilómetro y medio, hasta llegar al castillo de Sant Joan.
Desde el Castillo de Sant Joan disponemos de una panorámica sensacional sobre la población de Blanes. Es un lugar ideal para realizar la fotografía perfecta entre el arco que forma el castillo, que nos permite captar toda la playa, el Paseo de Mar y Sa Palomera.
Salimos del Castillo en dirección Cala Sant Francesc. De camino, nos detenemos en Jardín Botánico Marimurtra, un espacio fantástico que nos permite disfrutar de un paseo entre muchísimos ejemplares de plantas de todo el mundo y de un mirador con vistas espectaculares a Sa Forcanera.
Acabamos nuestra ruta en la Cala Sant Francesc, donde podemos saborear una gastronomía excelente en el restaurante Cala Bona, situado a pie de playa, y disfrutar de las fantásticas aguas de ese espacio natural.